miércoles, 2 de mayo de 2012

La turista en mí



          Siempre me han fascinado las tierras lejanas y las vidas de sus habitantes.  Cuando era niña leía muchos libros y mi imaginación me llevaba a lugares mágicos.  Los colores eran de la vida real, la gente se convertía en mis amigos y los lugares, las vistas que creé en mi mente, quedaban conmigo durante los años.  Como he crecido, aprendí que algunos de estos lugares mágicos existen en este mundo real en las tierras lejanas y que la gente de allí es tan fascinante como la de los libros de mi niñez.  Mi fascinación por el turismo y por mirar el mundo han inspirado los viajes que he tomado y los que quiero tomar.  Estas aspiraciones vienen de las horas incontables que he pasado con libros en las manos y mi imaginación como mi billete a una región mística.  Hoy en día, la oportunidad de ser turista existe no solo en los libros, y los billetes tienen destinos verdaderos.  La turista en mí nació con las historias de mi juventud y cada viaje y experiencia es como un tronco  más en el fuego.
            En mi opinión, la experiencia ideal se compone de varios elementos.  En general, hay responsabilidades de ser turista, y también hay derechos de los turistas.  Se debe elegir servicios y destinos con una promesa de la sostenibilidad y la conservación de los recursos naturales y culturales.  La eficiencia energética y el reciclaje están creciendo en la industria del turismo y una turista debe hacer todo lo posible para mantener el estado natural de la tierra.  Como una turista responsable, el patrocinio tiene que ser limitado a las compañías y los servicios con un ambiente de trabajo favorable para los empleados.  Se necesita tener regulaciones para el tratamiento de los trabajadores y una división imparcial de la riqueza turística y la toma de decisiones para la zona.  También hay ciertos derechos de un visitante de un destino turístico.  La seguridad personal es esencial y la falta de ella puede arruinar el atractivo de cualquier lugar.  No debe haber estafas en las atracciones turísticas y los precios no deben ser elevados escandalosamente para las ganancias de los dueños. Un ejemplo de la responsabilidad incluye limitar los impactos económicos, ambientales y demográficos y tener respecto social y cultural y sostenibilidad. Los derechos son la seguridad y la honradez.  Las responsabilidades y los derechos de los turistas dependen de las personas que participan en el turismo.  La inspiración de estas ideas para mí existe en un blog llamado “Sé un turista responsable” de un sitio sobre el turismo sostenible. La longevidad de la industria y los destinos más populares continuarían si mantenemos el respeto por ellos. 
Hay otraas aspectos de ser turista aparte de las responsibilidades y los derechos.  Lo que me gusta en mis experiencias turísticas es la novedad del desconocido.  Las experiencias de una nueva cultura como una lengua diferente, las paisajes del extranjero y la gente distinta, crean una experiencia ideal.  Mi primer viaje a México cuando tenía 16 años fue la primera vez que yo estaba inmersa en una cultura y un idioma completamente diferente.  Exploré las playas y la selva de la costa de México, vi las ruinas de los antiguos y bailé con los nativos a la música animada.  La oportunidad de comunicarme sólo en español me inspiraba y me fascinaban la cultura y la historia del área.  Esta ocurrencia tiene grandes impactos en lo que quiero hacer en mi vida.  Sabía entonces que quería aprender el idioma de esta gente y estudiar la industria del turismo en esta parte del mundo. 
He tenido otras experiencias como esta y son las influencias más grandes de mi carrera y mis metas en la vida.  Espero que pueda convertir la turista en mí en una carrera satisfactoria y alcanzar mis metas de explorar las tierras lejanas y mágicas para que la niña con los libros y la imaginación  se sienta realizada y orgullosa.